La educación se puede considerar unos de los principios básicos y más importantes para una sociedad civil bien organizada y también unida. Fomentando la ética y la cultura de respeto se pueden formar individuos responsables como miembros de una comunidad. En los últimos 20 años la globalización ha configurado una nueva percepción de la sociedad, que se entiende como internacional y que une diferentes culturas y costumbres. En este sentido, ha nacido una mayor voluntad de conocer los factores políticos, económicos y sociales que han determinado los desequilibrios globales, y también ha crecido la participación de los ciudadanos en la lucha contra la pobreza.